La Gimnástica Segoviana ya tiene sus primeros tres puntos de la temporada, después de ganar por 2-0 al CD Numancia de Soria. Los dos tantos locales fueron obra de Dani Plomer. En un encuentro que, por culpa de la lluvia, no se permitió crear un fútbol con demasiadas florituras, el mallorquín demostró ser un todoterreno con hambre de gol, marcando dos tantos. El primero tras recoger un balón suelto en el área, después de un lanzamiento lejano de falta; y el segundo, en un contragolpe solo ante el portero, a 6 minutos de acabar y que daba oxigeno a los de casa, que se le hizo muy largo el final.
El Numancia empezó su andadura en Segunda RFEF (Grupo V) con derrota en un partido duro, intenso y trabado en el que los segovianos fueron mejores en las áreas, que al final es la zona clave en el balompié. El Numancia lo intentó de muchas maneras, pero que no tuvo acierto de cara a la portería rival.
El partido resultó muy intenso y disputado. Se peleaba cada balón, cada metro del campo, cada acción de disputa con una buena intensidad por parte de los dos equipos y eso conllevó bastantes interrupciones por faltas y hasta cuatro amarillas en la primera parte -dos por cada equipo-.
El campo no estaba para florituras ni para mucho juego combinativo y el balón estuvo durante buena parte del partido volando de área a área. Primo Hacía su trabajo con los defensas de la Segoviana y Dani Segovia hacía lo propio con los zagueros del Numancia, pero el partido se rompió en una falta lateral favorable a los locales. Dorronsoro no pudo blocar la pelota ni despejarla con acierto y el balón quedó muerto en el área pequeña donde Plomer sólo lo tuvo que empujar a la portería.
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La suerte volvía a ser esquiva con el Numancia, que con desventaja en el luminoso tuvo que dar un paso adelante en busca de la igualada.
La reanudación, más de lo mismo. El Numancia buscando el empate, buscando la referencia de sus dos atacantes y los centros de Bonilla y las triangulaciones con Carlos Gonzalez, pero poca claridad en cuanto se llegaba al área y nulo acierto de cara a portería. La ocasión más clara para el Numancia en todo el partido fue un tiro al palo de Primo, en el minuto 56.
Con el equipo rojillo volcado y abierto en busca de la igualada, Plomer cerró el partido en el minuto 89 tras una gran jugada individual, en la que superó a cuantos numantinos le salieron al paso, incluso el meta Dorronsoro.