El clásico de Castilla acaba con sorpresa inesperada y dejando ajustados al máximo los puestos altos de la liga. La Gimnástica rompe la magnífica racha del Real Ávila, que aún no conocía la derrota, y se pone a solo un punto de los abulenses en la clasificación, 14 a 15, y a dos de la Arandina que sorprendentemente no pudo pasar del empate ante el Burgos Promesas.
El encuentro empezaba con problemas para los encarnados con Eduardo Martín retirándose del 11 inicial por molestias y siendo sustituido por Iván Vila. A pesar de ello, la primera parte transcurrió con igualdad y ocasiones para ambos equipos, que sin embargo no acababan de materializar sus jugadas.
La igualdad era máxima, con pocas ocasiones para ambos conjuntos, si bien los segovianos estuvieron a punto de adelantarse en el marcador gracias a Mika. Pero al final ambos conjuntos acababan la primera parte con un 0-0 en el marcador que no hacía presagiar lo ocurrido en la segunda. Justo al filo del descanso la Gimnástica sufría un pequeño mazazo con Asier Arranz retirándose lesionado del campo.
Tras la reanudación no tardaba el partido en dar un giro radical con el primer gol segoviano, gracias a un buen remate de cabeza de Mika a pase de Adrián Perez, que complicaba las cosas a los abulenses.
? Que alguien localice al cartabón que la escuadra ya la hemos encontrado, gracias. ??@lagimnastica @RealAvilaCF pic.twitter.com/2lGBrPKn6Y
— Footters ⚽ (@footters) September 29, 2018
El marcador se mantenía estable durante los siguientes minutos, con ambos equipos demostrando su buen hacer en el campo, pero finalmente eran los segovianos los que volvían a perforar la portería de los encarnados en el minuto 70 con dos tantos casi consecutivos de Alex Conde que dejaban el partido sentenciado para el Real Ávila.