Villa de Aranda y Balonmano Burgos brindaron a los espectadores en el Santiago Manguán un emocionante derbi provincial, resuelto en el último suspiro (27-26) a favor del equipo que más lo necesitaba en la clasificación.
Los dirigidos por Roi Sánchez nunca se sintieron cómodos en ningún momento frente a un equipo ribereño que se mantuvo sólido en todo momento. El portero Pau Guitart, junto con un viejo conocido, Dalmau Huix, desempeñaron papeles cruciales en esta batalla.
El derbi provincial comenzó con los capitalinos tomando una ventaja de 0-2, con el primer gol de Ernesto López y un segundo en un rápido contraataque. Sin embargo, lo más destacado fueron las dos impresionantes paradas del portero visitante, una de ellas en un contraataque local a quemarropa.
Los ribereños se mantuvieron sólidos en defensa, pero enfrentaron dificultades ofensivas y su primer gol llegó después de cinco minutos. Sin embargo, Dalmau Huix se mantuvo como el referente ofensivo del equipo arandino. Después de un período de dominio por parte del Villa y un gol de Pau Guitart de portería a portería, se produjo un cambio en el marcador (5-3 en el minuto 11). El equipo de Roi Sánchez sufrió un parcial de 4-0, estaba siendo claramente superado y, aunque Berbel finalmente rompió la sequía, la defensa no se ajustó completamente.
Una primera exclusión temporal al equipo local proporcionó un breve respiro al Burgos, pero pronto los visitantes se encontraron en inferioridad numérica. La ventaja creció a 9-5 a favor del Villa de Aranda a mitad de la primera mitad, con Krasimirov destacando en los lanzamientos.
Después de un tiempo muerto de Roi Sánchez, el portero local Pau Guitart realizó su segunda parada consecutiva, con un pie prodigioso. Jorge García Lloria respondió con una gran parada en el extremo derecho, pero el Burgos seguía teniendo dificultades para superar la excelente defensa de Javier Márquez, clave para el buen desempeño del Villa de Aranda.
Sin embargo, el Burgos es un equipo que siempre compite, y apretando en defensa y con su portero destacando, lograron reducir la desventaja a solo dos goles. El entrenador del Villa de Aranda decidió detener el partido y refrescar las ideas.
Fue una decisión acertada, ya que su equipo recuperó la efectividad y logró un parcial de 2-0, volviendo a poner a su rival en aprietos. En un momento crítico, el Burgos confió en Ernesto López para recuperar sensaciones y gran parte del terreno perdido con un parcial de 0-3 en apenas dos minutos (11-10). Sin embargo, el Villa de Aranda se mantuvo firme y, con Pau Guitart como gran protagonista de la primera mitad y la motivación de Dalmau Huix, se fue al descanso liderando el marcador (14-12).
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En la segunda mitad, dos goles de Dalmau Huix y otra gran intervención de Guitart abrieron nuevamente la brecha. Pero el Burgos respondió con rapidez, reduciendo la desventaja a la mínima expresión (16-15).
El partido estaba emocionante pero peligroso para un Burgos que no podía detener a un inspirado Dalmau Huix. El Villa de Aranda volvió a tomar ventaja (19-16 en el minuto 8). Ambos equipos jugaban en rachas, y esta etapa del juego favoreció nuevamente a los capitalinos. Con otro parcial de 0-3 y jugando en superioridad, lograron empatar después de muchos minutos en desventaja (19-19 en el minuto 13).
Sin embargo, la remontada no se materializó, ya que la grada comenzó a influir en el juego con protestas y el local Berbel mostró su precisión. El Villa de Aranda volvió a tomar una ventaja de dos goles a mitad de la segunda mitad.
Una vez más, el Burgos no se rindió y no permitió que su rival se alejara. Sin embargo, Jaime González falló un tiro de siete metros para igualar el marcador, y en el siguiente ataque, los locales anotaron y provocaron una exclusión temporal (24-22 en el minuto 23). El tiempo se agotaba para el equipo de la capital, que estaba en apuros y no tenía suerte. Jaime Gallardo golpeó el poste y el Villa de Aranda, con Guitart incansable y el apoyo de su afición, se acercó un paso más a la victoria (26-23 en el minuto 26).
El Burgos arriesgó todo. Su defensa comenzó en la línea de medio campo y terminó con una destacada actuación de Ibrahim Moral (26-25 en el minuto 27). Solo faltó un poco de suerte, ya que dos minutos más tarde, después de buenas defensas y más paradas de Moral, Jaime Gallardo estrelló el balón en el lateral de la red.
Así, a falta de un minuto, Berbel sentenció la victoria desde los siete metros, y el Villa de Aranda se llevó un derbi emocionante de principio a fin, con un resultado final de 27-26.