Después de tres jornadas de sequía y otras tantas sin conocer la miel del triunfo, el Real Ávila desató el tarro de las esencias para regresar al buen camino y festejarlo con una goleada sobre el Numancia B. Los de Borja Rubiato estuvieron activos e intensos imponiéndose con autoridad al equipo soriano, para postularse a estar entre los mejores tras un buen partido de los encarnados, que se alzan al cuarto puesto de la clasificación.

Partido gris el jugado por el filial numantino en la tarde de domingo frente al Real Ávila en el estadio Adolfo Suárez. La primera parte sí resultó igualada, disponiendo incluso los numantinos de alguna ocasión para adelantarse, pero sin fortuna en la finalización. Sin merecer nada positivo, el conjunto local iba a adelantarse en el marcador, cuando Llorian, con un potente disparo, convirtió en gol un balón muerto en el área tras un centro lateral mal despejado por la defensa numantina. Al descanso se llegó con buenas sensaciones para los sorianos, que veían, a pesar de la desventaja en el marcador, que el partido transcurría según lo previsto. Todo cambió en la segunda parte.

Con las bajas de Dani Tena -suplido por Llorián que pasaba al eje de la defensa, dando entrada en el flanco izquierdo a Walter– y de Espada -sustituido por Rober-, el conjunto abulense comenzó mostrando sus intenciones desde el principio. Cuando aún no había transcurrido el primer minuto Rober enviaba el balón a las manos de Romera en el primer acercamiento del choque. Y en el 3’ un disparo cruzado de Llorián rozaba el palo de la portería visitante.

El filial del Numancia no se amilanó por el fuerte ritmo impuesto por el cuadro local en la fría tarde. En el 8’ obligaba a Christian a realizar un paradón para salvar el 0-1, ante un error de la defensa encarnada que facilitaba a Mallen para que efectuara un potente lanzamiento. Era la primera oportunidad clara del encuentro.

Un gol de Rober en el 25’ lo anulaba el colegiado por fuera de juego tras un tiro de Ortolà que pegaba en la zaga numantina y recogía el delantero. Se necesitaron seis minutos más para que el Real Ávila abriera la lata. Lo consiguió el capitán Llorián con un zapatazo que pegaba en el travesaño y se introducía dentro del marco rival.

Con el 1-0 y el dominio abulense, quedaba aún mucho tiempo para que el devenir del choque pudiera caer de uno u otro lado. La mínima ventaja local dio paso a que el Numancia B mandase sus fuerzas a por el empate aunque sus acercamientos eran repelidos por la muralla local, cuyo jugador Walter probaba fortuna en el 39’ con un disparo desde lejos que se iba fuera.

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Un segundo tiempo arrollador

Tras la reanudación, el Real Ávila salió dispuesto a sentenciar. A los seis minutos de rebasado el entreacto, Yeriel se internaba en el área y Joto intentaba despejar el esférico pegando en Rober e introduciéndose bajo los tres palos visitantes. Era el 2-0 que hizo daño en el contrario, quien se vio acosado con dos acciones de Yeriel, la primera mediante un chut que detenía Romera y la segunda con un disparo que se marchaba alto.

El 3-0 se produjo al filo de la hora de juego. Lo materializaba Ortolà, quien recibio una asistencia de Rober y con un tiro cruzado colaba el balón en las redes. Introducía cambios el Real Ávila y se iban Rober y Llorián por Julio Rengel y Ribe, este último debutante en Tercera.

Apuraba sus opciones el Numancia B para conjugar diferencias. Christian realizaba una buena parada ante un potente lanzamiento de Peláez en el 65’. Cuatro minutos después vendría el 4-0, obra de Juanpe tras una buena combinación entre Javi de Mesa e Ivi, centrando al segundo palo para que el centrocampista solo tuviera que rematar.

Continuó acosando el Real Ávila el marco de Romera, que paraba un tiro de Julio Rengel. Remataba al conjunto soriano con el definitivo 5-0 a tres minutos de la conclusión. Lo anotaba Ortolà, el segundo en la cuenta del valenciano, después de recibir un centro de Jou.