Celebración de un gol del Real Burgos la pasada temporada 2017/18

El Real Burgos volverá a jugar la próxima temporada. Y lo hará en la Tercera División. Esto es, al menos, lo que dicta el juzgado de Primera Instancia Nº6 de Majadahonda, en el que es el penúltimo episodio de un asunto que se está estirando ya demasiado.

Según la sentencia, el juez entiende que la intención de la Real Federación Española de Fútbol era “impedir la ejecución del auto de 16 de agosto de 2018”, es decir, la medida cautelar que ponía al Real Burgos a jugar en Tercera la presente temporada.

Así se refiere el juez a la maniobra que realizó la RFEF para quitarle las competencias de organizar la Tercera División a la Federación de Castilla y León de Fútbol. De hecho, señala que “la actuación de la RFEF es incardinable en Fraude de Ley”.

La sentencia indica que la RFEF supo de la medida cautelar, porque así se lo trasladó la federación regional días previos al inicio de la temporada. Aquí el juez es tajante al aseverar que “lejos de cumplir lo ordernado conforme a los artículos 17 y 18 de la LOPJ y 118 de la Constitución Española, optó por hacer exactamente lo contrario: ejercer su alegada competencia para organizar la competición excluyendo a la FCYLF a fin de eludir el cumplimiento del auto”.

Vuelve a repetir, el magistrado, el término “fraude de ley” antes de sentenciar la presencia del equipo burgalés en el Grupo VIII de Tercera División para la temporada 2019/2020.

Según ha explicado el Real Burgos C.F. SAD a través de un comunicado de prensa, el equipo se encuentra ya trabajando en la formación de su plantilla de cara a la pretemporada de los próximos meses.