El Real Zaragoza derrotó por un claro (2-0) al Burgos CF, acabando así con las esperanzas de la afición blanquinegra de ver a su equipo en dieciseisavos de final por tercera vez en su historia, y quien sabe si en casa ante un primera, con la positiva repercusión monetaria para las maltrecha economía del equipo. Calero optó por un equipo repleto de suplentes, al igual que el Real Zaragoza, sin embargo el equipo burgalesista lo pagó con la derrota.
El enfrentamiento fue el estadio de La Romareda, en partido correspondiente a la segunda ronda eliminatoria de la Copa del Rey, que finalizó con el resultado de dos goles a cero a favor del conjunto zaragocista, que de esta forma obtuvo su billete a los dieciseisavos de final de la competición. Iñigo Eguaras y Adrián González fueron los autores de los tantos que otorgaron un merecido triunfo a los aragoneses.
El duelo comenzó con ritmo e intensidad por parte de los locales, que pronto gozaron de su primera ocasión para abrir el marcador en botas de Iván Azón. El canterano, en el minuto uno, se plantó solo delante de Alfonso, que logró evitar el tanto zaragocista. Los castellanoleoneses respondieron en el seis con una oportunidad de Rober, cuyo disparo atrapó con solvencia Ratón, titular bajo palos en la noche de hoy.
Volvió a intentarlo poco después Iván Azón, con un remate en el primer palo, tras pase de Nieto, que acabó repeliendo el larguero, si bien el juez de línea marcó posteriormente la jugada como fuera de juego.
Finalmente, a la media hora de juego, fue Iñigo Eguaras quien logró inaugurar el tanteador, tras remachar a la red desde la frontal del área en una jugada en la que previamente ya habían estaado cerca de anotar Azón y Borja Sainz, con sendos remates dentro del área.
A la vuelta de los vestuarios, poco tardaron los blanquillos en ampliar su ventaja. Adrián condujo una perfecta transición ofensiva abriendo a banda para Borja Sainz, que le devolvió la pelota al madrileño en la frontal del área para que este lograse un bonito gol, con un ajustado lanzamiento cruzado a la base del poste.
Tratarían de estirarse los visitantes a partir de ese momento, pero empezó a entrar en acción la fortaleza defensiva de los aragoneses y la buena actuación de Álvaro Ratón, que le negó el gol primero a Rubio, en un remate de cabeza tras una falta lateral (53′), y posteriormente al recién entrado Claudio, en un mano a mano que resolvió a la perfección. Fue la ocasión más clara del Burgos CF en todo el partido.
Con esta derrota el Burgos CF ya no estará en el sorteo de este viernes 17 de diciembre.
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