Después de dos derrotas consecutivas, el Carramimbre Ciudad de Valladolid viajaba a África para afrontar el primero de los encuentros de una semana que puede marca su futuro inmediato. El Melilla un clásico de la categoría buscaba dar continuidad a su última victoria, y recuperar el terreno perdido en un irregular inicio de temporada. Tras esta derrota el equipo de Valladolid se aleja del los puestos de arriba que pueden llegar a estar hasta a tres victorias de distancia.
El partido
No comenzaron bien las cosas para los pucelanos, prácticamente a remolque desde el inicio del partido, se llegaba al final del primer cuarto con la máxima desventaja del choque en el marcador 18-11.
La dinámica fue similar en el comienzo del segundo acto, un Caramimbre poco acertado en ataque, frente a un Melilla que conseguía con demasiada facilidad encestar en el aro de los de Castilla y León. Un parcial de 7-0, en sólo dos minutos, obligaba a Paco García a solicitar un tiempo muerto, ante el huracán melillense (25-11). No pareció surtir mucho efecto, en un abrir y cerrar de ojos Melilla volvían a zarandear a los de Valladolid (38-13), segundo tiempo muerto de los visitantes, intentando parar la anotación del cuadro del norte de áfrica, y buscando frenar la inoperancia del ataque del Carramimbre. El equipo visitante estaba roto, y se fue “desangrando” poco a poco, se llegó al descanso con los melillenses casi doblando en el luminoso a los vallisoletanos ( 51-26).
Segunda parte
Con 25 puntos abajo la empresa de lograr algo positivo en Melilla se antojaba complicada. Quedaba poco menos que maquillar el tanteador, a 6:45, para el final del cuarto 55-32. En el tercer cuarto, llegó cierta relajación de los locales, y algo más de acierto de los visitantes, que aunque tampoco se acercaban en el marcador, consiguieron frenar el agujero defensivo. Sin embargo el intercambio de canastas beneficiaba claramente a los locales, para acabar el tercer acto con un claro 66-46.
Visto lo visto el último cuarto parecía meramente un trámite que había que cumplir, pero no fue así. A 8:21, 68-48, no se recortaban las distancias. 68-52 a 06:50, un parcial de 0-4, en una tímida reacción del Carramimbre. Valladolid lo seguía intentando, reduciendo, poco a poco la desventaja en el marcador, 73-57 a 04:40. 73-60 a 4:10 del final, a punto de romper la desventaja psicológica de los diez puntos.73-62 a 03:18 del final. Al Valladolid le comenzaba a entrar todo, se redoblaban los esfuerzos en defensa, y daba resultado ¡Lástima del juego del segundo cuarto! 75-67 a 02:21, a estas alturas la remontada parecía posible.76-69 a 01:19.79-72 a 00:29. Pero hasta ahí se pudo llegar, la amplia desventaja er prácticamente insalvable, al Carramimbre le faltaron 5 minutos de partido para lograr su objetivo. Un partido con tres cuartos para olvidar, la irregularidad se paga.
El futuro
El Valladolid está viviendo el peor momento de la temporada. Crisis que llega en unos días donde se acumulan los enfrentamientos. La próxima cita es el domingo a las 19:00 h. frente al Granada, un equipo, en teoría, más asequible que el rival de esta noche.
