A la tercera fue la vencida aunque con “trampa” pues el pabellón Europa de Leganés fue un “mini Wúrzburg” que no dejó de apoyar ni un minuto , ni cuando las cosas fueron mal, que lo fueron. Y es que Avenida sufrió, mucho más que el 75-85 que refleja el marcador ante Innova TSN Leganés. El esfuerzo de todo el equipo y el aliento de la afición fue importante, pero el partido y los números de Maite, Aleks y Julia merecen su mención.
Un festival en la grada, un festival en el inicio de partido por ambas partes. Pero sólo ofensivo. A Avenida le volvía a salir ese partido alegre en ataque pero demasiado alegre en defensa y lo aprovechaba el equipo local para crecerse y crecerse. El duelo de cañoneras entre Aleks y Pointer, al más puro estilo NBA dio paso al bajón de Avenida. Cuando el acierto desapareció, se vieron las costuras de nuevo en el apartado defensivo, concendiendo una barbaridad, 17 puntos en apenas seis minutos. Se apretaron un poco las tuercas pero las madrieñas gozaban de su partido y sus rentas, que tras diez minutos reflejaba un 22-16.
La cosa no terminaba de gustar en absoluto a Roberto que pedía defensa en cada tiempo muerto, pero no aparecía esa defensa por ninguna parte. Hubo momentos de franco desconcierto atrás que aprovechaba Innova TSN para freir a triples tras rebote ofensivo ante la aparente permisividad interior de las azulonas. Nueve puntos de ventaja local encendían las alarmas antes de que Yoyo encontrase por fin los triples, el primero un churro, el segundo buscado, para reducir la renta y quedarse muy vivo al descanso, 41-38.
Parecía que Avenida había hecho lo más complicado, aguantar en el marcador tras una primera parte de mucha “agua”, pero no, aún quedaba por recibir. Una salida con mucho menor ritmo ofensivo, mucho más trabada y trabajada parecía poder beneficiar a las azulonas, pero tampoco fue así. De nuevo parcial de Leganés para volver a ponerse, en otro momento crítico, con ocho de ventaja. Y, re nuevo, a reaccionar. Asumió galones Maite, omnipresente como el búho de la camiseta de Avenida, atrás y adelante. Atrás ayudada por Andrea, extraordinario su trabajo en un día menos lucido en ataque pero de tremendo valor, adelante ayudada por el resurgir interior de Julia y Fas. De nuevo, con vida a diez minutos del final, 61-59.
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Y llegaron los mejores momentos de Avenida cuando pareció querer romper el duelo. Un parcial de 0-11 charro con Reisingerova anotando por dentro y por fuera y apareciendo la defensa que tanto se ansiaba. El equipo local pedía tiempo muerto cuando se veía con ocho de desventaja en un abrir y cerrar de ojo. ¿Partido sentenciado? Más hubiera querido Avenida. La reacción fue tan rápida como el parcial anterior, pero ahora en contra. Un 0-8 en apenas un minuto para volver a empatar el duelo. Y aún quedaban más de cinco minutos de emoción. Y hubo emoción. Y de todo, una técnica al banquillo local, una antideportiva a Fas tras recibir un bonito abrazo de una jugadora madrileña no sancionado. Un toma y daca de errores y aciertos, fas expulsada con faltas, Juia con cuatro… El triple de Crvendakic volvía a poner por delante a Avenida, el robo de Maite ponía el +5 y una ligera tranquilidad que sólo una pérdida azulona puso en entredicho. Calma y saber hacer para cerrar un duelo ante un rival que hizo un choque excelente y ante el que se dio absolutamente todo con las circunstancias existentes.
Las charras ya son segundas, a sólo una victoria del líder, Zaragoza.
